En el marco del Tratado de Libre Comercio T-MEC, el sector automotriz vuelve a generar una nueva controversia entre México y los Estados Unidos. Este tratado entró en vigor en el mes de julio de 2020 en substitución del TLCAN; sin embargo a escasos 20 meses de operación, se han suscitado una serie de “posibles” violaciones a algunos de sus capítulos, por lo que tanto el gobierno de Biden como el de López Obrador, se han lanzado diversas advertencias, que van desde la imposición de aranceles a productos sensibles originarios, solicitar ante la OMC un panel de controversias, y en el peor de los escenarios, dejar de ser parte del tratado.
Desde la óptica del gobierno de los Estados Unidos, nuestro país con la propuesta de la Reforma Energética impulsada por AMLO, viola algunos capítulos del T-MEC, al atentarcontra la protección del medio ambiente, por impulsar la producción y el consumo industrial de combustibles fósiles, así como también, por perjudicar a la inversión extranjera directa (IED) norteamericana, dedicada a la generación deenergías limpias, la cual está actualmente instalada en territorio mexicano.
En contraparte, el gobierno mexicano acusa a los vecinos del norte, por violentar el T-MEC debido a la interpretación y aplicación de las reglas del origen del sector automotriz, además de que el presidente Biden, pretende otorgar en el corto plazo, un subsidio a los compradores de coches eléctricos que se produzcan y se adquieran en Estado Unidos, lo cual tendría un impacto catastrófico en la producción de autos en México, cuyo destino principal es Estados Unidos.
¿En qué consiste este subsidio que preocupa tanto al gobierno mexicano? Mediante la iniciativa llamada “BuildBack Better Act”, el gobierno norteamericano tiene como meta, que para el año 2030, el 50% de los automóviles que circulen por el territorio del país, deberán ser eléctricos. Para alcanzar este porcentaje, - a partir del 1 de enero del 2027-, se pretende otorgar un incentivo fiscal de hasta $12,500 dólares a los compradores de este tipo de automóviles, siempre y cuando, cumplan con los siguientes requisitos: que hayan sido ensamblados en los Estados Unidos, en plantas que tengan vigente un acuerdo colectivo sindical, además de que las partes utilizadas en su ensamble, sean de origen norteamericano.
Así mismo, para los vehículos adquiridos antes del 1 de enero del 2027, habrá dos apoyos; el primero conocido como “Subsidio Base”, equivalente a la cantidad de $4.000 dólares; además de un segundo, llamado “Subsidio Suplementario”, por el monto de $3.500 dólares.
Con esta iniciativa, se puede asumir que Joe Biden pretende: que el país lideré a nivel mundial, una estrategia sólida en favor de la protección al medio ambiente; fortalecer al sector automotriz nacional, haciéndolo más competitivo en precio;estimular el crecimiento del mercado interno al aumentar la demanda por automóviles ensamblados en el país, así como desalentar las importaciones de autos de otros países, entre ellos México, los cuales en la actualidad, son directamente competitivos con los de origen norteamericano.
¿Cuál es la preocupación de México ante esta iniciativa? Sin lugar a dudas, el impacto negativo que tendría sobre la ya lastimada industria automotriz mexicana, la cual, de acuerdo a datos de la Secretaría de Economía, en el año 2021 se contrajo en aproximadamente un 33% con respecto a 2020. Otros datos que proporciona la Secretaría de Economía, que justifican la preocupación del gobierno mexicano son los siguientes: esta industria representa el 4 % del producto interno bruto (PIB) de México y el 25 % del valor total de sus exportaciones, genera un millón de empleos directos y cinco millones de indirectos.
Bajo este panorama de incertidumbre, queda en el aire la siguiente interrogativa: ¿Será esta subvención a los automóviles eléctricos la estrategia de Biden para negociar con López Obrador que cancele su idea de seguir adelante con la reforma a la Ley Energética? Con seguridad, en un corto plazo lo sabremos… Esperamos que el resultado de esta negociación sea en beneficio de la economía de nuestro país.