Información: José Andrés Pérez
Uno de los problemas que tienen las MiPymes en el momento de pensar en iniciar su proceso de internacionalización hacia cualquier país, es la falta de recursos económicos para adaptar el producto a las necesidades del mercado. La adaptación a los requerimientos legales o normativos, culturales y/o sociales del mercado meta, -son en muchos casos-, un obstáculo insalvable que impide que el empresario pueda ofrecer un producto que satisfaga las necesidades de los consumidores, que sea competitivo en precio y que, además, cumpla con los atributos requeridos para que pueda competir contra bienes idénticos o similares, originarios de cualquier país del mundo.
Es en este contexto, cuando surge como una alternativa viable para estas empresas, enfocar sus esfuerzos para exportar productos conocidos como “Nostálgicos” o de la “Nostalgia”, los cuáles al orientarse a mercados altamente diferenciados, no requieren ninguna adecuación con respecto a la forma en que se producen, consumen o se usan en el país de origen. Sin embargo, esto no significa que no deban cumplir con estándares sanitarios o de etiquetado del país al que se pretendan exportar.
Su éxito se basa en el sentido de pertenencia que transmiten a los consumidores, principalmente a aquellos que han migrado de manera temporal o permanente, legal o ilegal y que añoran cultivar las raíces del país en el que nacieron y crecieron.
De acuerdo a la Comisión Económica para América Latina y el Caribe CEPAL, son productos “Nostálgicos”, cualquier bien o mercancía, comida, ropa, artesanía, música, etc. que forma parte de los hábitos de consumo, cultura y tradición de los diferentes pueblos y naciones”, los cuales extrañan los migrantes, quienes desean integrarlos a su vida diaria.
Los “Mercados Nostálgicos” de mexicanos alrededor del mundo, son un nicho muy importante para las empresas mexicanas que comercializan productos típicos. Estos mercados crecen rápidamente a medida que el número de migrantes también lo hace, por lo que la demanda por productos con las características mencionadas, es cada vez mayor entre la comunidad.
Como ejemplo, la Oficina del Censo de los Estados Unidos (US Census) reporta que en 2020, la población de origen hispano en la Unión Americana era un poco más de 55 millones de personas. La misma fuente estima que en 2030, los latinos en Estados Unidos serán alrededor de 68 millones; datos que representan el 17% y 19.4% respectivamente de la población total norteamericana. De esta población hispanoparlante, la misma fuente estima que el 61.7% son de origen mexicano, principalmente de los estados de Guanajuato, Jalisco, Michoacán, Guerrero, San Luis Potosí y Durango.
Los datos mencionados deben ser considerada por el empresario mexicano, como una opción para iniciarse en el mundo de las exportaciones con el menor esfuerzo y riesgo, toda vez que hay un nicho de mercado en constante crecimiento, en el que siempre habrá una demanda insatisfecha por los productos “Nostálgicos”, de los cuales México tiene una amplia variedad para ofrecer al mundo.
El tamaño del mercado es de muchos millones de dólares, razón que obliga al empresario a diseñar una estrategia de comercialización, acorde a las características de cada empresa, que le de viabilidad al proyecto y haga exitoso el negocio.
El reto para las MiPymes es prepararse para enfrentar estas oportunidades de mercado y tener los elementos técnicos suficientes, para abordar con éxito esta oportunidad que le brinda la globalización y la presencia de México en el mundo.
